Llenaría cuadernos de sentimientos y no habría suficiente
papel en el mundo para expresar lo que siento, expresando la renovación de mi
alma y mente, de mi sentir sin más.
Podría contar pequeños detalles que me hace sentir cada día
que estoy a su lado, tan diversos, tan completos y especiales
Una mirada, un gesto, una manía, una coletilla es igual todo
le pertenece, es suyo pero también mío al compartirlo conmigo.
A veces sin que se dé cuenta le observo su estar, sus
movimientos no sé si es intentando que se quede en mi retina, como remanente en
como en la despensa de mi cerebro para poder recuperar esos instantes cuando él
no está a mi lado.
Que gran contenido de sensaciones, solo mías las cuales ni
el mismo las percibe cuando ocurren porque es mi momento y mi sentir personal.
Un secreto conmigo misma que comparto a solas en momentos de
nostalgia y de ausencia o alegría.
Porque a veces sin mas algo me lo recuerda y entonces se
abre la despensa de mis recuerdos y mis secretos personales.
Los cuales alguna vez le regalo y se lo cuento, entonces se
sorprende haciendo aflorar esa bella sonrisa que transforma esa cara tan
adorable
Y hasta ladea la mirada como con vergüenza, sé que es porque
quizás nadie nunca le dijo nada igual.
Le observo y expreso esa necesidad de él, se que le gusta,
se que se sonroja pero sobretodo se que es feliz porque encontró lo que siempre
busco, encontró lo que merecía que le amen así
Porque tiene mucho
dentro de sí que muy pocas veces le valoraron, pero yo lo hago y siempre lo haré.
Por eso quizás nuestros caminos se cruzaron, yo creo que
estaba escrito porque cada segundo que paso a su lado se que es mi EL.
Ayelen